miércoles, 21 de agosto de 2013

A la hoguera con las prioridades


He escrito este artículo para el blog de productividad El Canasto. Gracias Jeroen por la invitación. Sin más, os dejo con él.

Hubo un tiempo en que probaba todo tipo de aplicaciones para gestionar mis proyectos, cuanto más sofisticadas y vistosas mejor. Empleaba el tiempo en crear muchas listas e incluir en ellas docenas de tareas. A cada tarea le asignaba un montón de parámetros (el color era el parámetro más importante por supuesto).

Con demasiada frecuencia pasaba más tiempo organizándome que haciendo algo útil. La propia organización y las herramientas de productividad se habían convertido en sí mismas en un hobby.

La prioridad era uno de esos parámetros que asignaba a todas y cada una de las tareas enlistadas.

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2 comentarios:

  1. La verdad es que a mí no me hace falta ninguna lista gsd, gtd...
    Mi vida es muy simple y se lo que tengo que hacer en todo momento. El problema es que no las hago.
    La verdad es que nunca he entendido la necesidad de un gestor de tiempo. Supongo que es porque mi vida es muy sencilla.
    Pero mi reflexión, es que si hay personas que tienen muchas tareas que hacer en un día, ¿por qué complicarse buscando programas que te recuerden lo que tienes que hacer y en qué orden?
    Vuelvo a repetir que mi vida es extremadamente poco complicada y me cuesta trabajo ponerme en tu sitio.
    Un saludo.

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  2. Hola Pedro,
    Los sistemas de organización como GTD se utilizan en trabajos en los que es necesario procesar, administrar y crear información. Y lo que es muy importante, las tareas no vienen dadas, no hay nadie que te dice exactamente lo que tienes que hacer y en qué momento sino que tienes que decidirlo tú en función de los resultados que se esperan de ti.
    A una cajera de supermercado no le hace falta ningún sistema para organizarse porque su trabajo consiste simplemente en pasar los productos por el escáner y luego cobrarle al cliente. En su trabajo no procesa e-mails, ni realiza informes, ni presentaciones... Y no por eso tiene poco mérito, simplemente su labor no requiere de GTD ni nada por el estilo.
    En mi trabajo, por ejemplo, se espera que yo enseñe a mis alumnos a programar pero nadie me dice exactamente (ni siquiera la ley lo dice) qué lenguaje hay que utilizar, con qué herramientas hay que trabajar, qué contenidos hay que dar, cómo hay que dar esos contenidos, qué material hay que utilizar,... y un largo etcétera. Si a eso le añades que la Informática avanza a un ritmo vertiginoso y hay que revisar todos los contenidos (cuando no cambiarlos por completo) cada curso; entonces si no me organizara de alguna manera la calidad de mi trabajo se vería mermada.
    En cuanto a lo que comentas de no hacer las tareas que sabes que tienes que hacer, en productividad se llama "procrastinación". Hay mucha documentación sobre el tema que te puede ayudar. Un consejo que te daría y que suele dar muy buen resultado es dividir la tarea que estás postergando en tareas más pequeñas de tal forma que completar la primera de ellas no te cueste mucho esfuerzo. Si das el primer, ya queda menos.

    Muchas gracias por comentar, espero no haberte aburrido con mi respuesta jejeje.

    Un abrazo

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