miércoles, 13 de febrero de 2013

Un tiempo para cada cosa y cada cosa en su tiempo


De todos es conocido el beneficio que aporta al orden y la eficiencia aplicar la máxima "Un sitio para cada cosa y cada cosa en su sitio". Para seguir esta regla es necesario invertir algún tiempo en asignar una ubicación a cada objeto, pero ese tiempo se ve amortizado rápidamente por la facilidad con que se puede localizar cada cosa. Yo sé con total certeza que mi pen-drive está en el primer cajón de la mesa del ordenador, en una cajita, junto a otros dispositivos de almacenamiento: tarjetas SD, miniSD y discos duros externos. Si necesito el pen-drive no pierdo el tiempo buscándolo, tiene su sitio, igual que las declaraciones de la renta o las varillas de incienso.

¿Es extrapolable este esquema a la gestión de tareas? ¿podríamos decir que "un tiempo para cada cosa y cada cosa en su tiempo" es un sistema válido para decidir a qué proyecto se le mete mano en un instante determinado? Veamos...

Llevo tiempo empecinado en aplicar ciertos criterios como la prioridad, la urgencia y el nivel de energía para seleccionar la próxima tarea a realizar y sinceramente no me terminan de funcionar. Y es lógico que no me funcione porque la mayoría de las veces, por pereza, ni siquiera asigno prioridades ni niveles de energía cuando meto tareas en mis listas. Luego tengo que perder tiempo en decidir qué es lo importante y qué es lo que puede esperar.

Durante buena parte del pasado 2012 no seguí ningún tipo de orden a la hora de practicar deporte. Decidí hacer lo que me apeteciera en cada momento. Siempre tengo trabajo pendiente, así que en multitud de ocasiones en las que me hubiera gustado salir a andar o coger la bici, pospuse la actividad física a cambio de trabajar, a veces, en cuestiones que no eran completamente imprescindibles. Como resultado gané algunos kilos y perdí forma física. A principios de este año volví de nuevo al gimnasio. Voy cuatro días a la semana y siempre a la misma hora. Si tengo que realizar alguna otra actividad, se desplaza en el tiempo de forma automática hasta que encuentra otro hueco, dos cucharadas de azúcar no caben en la misma cuchara. En poco más de un mes ya noto los resultados.

A mis espaldas llevo dos intentos fallidos de estudiar por la UNED, en ninguno de los dos intentos, muy separados en el tiempo, conseguí superar ni tan siquiera un curso completo. Sin embargo me puedo congratular de haber terminado satisfactoriamente los cinco cursos de inglés y de ruso en la Escuela Oficial de Idiomas. ¿Qué marcó la diferencia? Pues entre otras cosas, cuando estudiaba por la UNED no seguía un ritmo regular de trabajo, mientras que cuando estudiaba en la EOI seguía un horario de clases que cumplía a rajatabla.

Cada uno tiene su manera de organizarse. A mí, para cierto tipo de tareas, me viene muy bien lo de "un tiempo para cada cosa y cada cosa en su tiempo". Tiendo a procrastinar cuando no estoy sujeto a un horario y, al mismo tiempo, soy muy disciplinado cuando me consigo habituar a una rutina

¿Y tú? ¿eres de los que "encajonas" las tareas en el tiempo o eres capaz de ir por libre sin las ataduras que imponen los horarios?


9 comentarios:

  1. Jamás seré capaz de ir por libre, jaja...

    ResponderEliminar
  2. Te recomiendo leer el GTD, y si ya lo has hecho releerlo ;)

    ResponderEliminar
  3. Lo tengo leído y releído, pero se ve que soy duro de mollera :)
    Bueno, cada vez que lo leo e intento aplicarlo por n-ésima vez, aprendo algo nuevo; así que le daré otra oportunidad.

    ResponderEliminar
  4. Que casualidad hoy mismo yo llegue a la mis conclusión que tu yo también he tratado GTD , también 7 habitos , Yo me había percatado de que cuando me dan horarios y "deadline" yo soy muy cumplidor. Sin embargo cuando tengo un tiempo libre para dedicarle a lo que yo quiera , ese tiempo me lo roba cualquier cosa ,otra gente o distracción. Por eso decidí casar cada tiempo con un proyecto o tema que este tratando,

    ResponderEliminar
  5. Hola Domingo, yo creo que lo bueno es lo que le funciona bien a cada uno. GTD está muy bien - sobre todo si se aplica de forma integral, no picoteando cosas sueltas - pero si encajonando en el tiempo ciertas tareas, logramos tenerlas bien controladas, no hay que renunciar a eso.
    Gracias por tu comentario.

    ResponderEliminar
  6. Hola José Luis, acabo de encontrar tu blog haciendo búsquedas sobre minimalismo. Esta entrada me ha hecho reflexionar y verme un poco también reflejada en tus palabras. Yo soy aquella que empezó a estudiar dos o tres oposiciones, la que se cansaba de ir a clase, la que tiene interés por todo y luego no conseguía nada. Desde hace un par de años, he notado que para que algo realmente te salga, tienes que concentrarte en ello con toda tu atención, tu foco y energías. Y no intentar mil metas a la vez! Gracias a eso he empezado este año mi propio blog sobre minimalismo y estilo de vida sencillo (que te invito a visitar www.presentesimple.com). Te seguiré muy de cerca! Gracias por extender una manera más sencilla de ver la vida.
    Un abrazo!

    ResponderEliminar
  7. Hola Luis José, acabo de encontrar tu blog haciendo búsquedas sobre minimalismo. Esta entrada me ha hecho reflexionar y verme un poco también reflejada en tus palabras. Yo soy aquella que empezó a estudiar dos o tres oposiciones, la que se cansaba de ir a clase, la que tiene interés por todo y luego no conseguía nada. Desde hace un par de años, he notado que para que algo realmente te salga, tienes que concentrarte en ello con toda tu atención, tu foco y energías. Y no intentar mil metas a la vez! Gracias a eso he empezado este año mi propio blog sobre minimalismo y estilo de vida sencillo (que te invito a visitar www.presentesimple.com). Te seguiré muy de cerca! Gracias por extender una manera más sencilla de ver la vida.
    Un abrazo!

    ResponderEliminar
  8. Hola Sandra, me gusta tu blog, lo acabo de añadir a mi Google Reader :-)


    Un saludo

    ResponderEliminar